La implementación de las TIC en la educación del siglo XXI

   La implementación de las TIC en la educación del siglo XXI 

El Ministerio de Educación Nacional en la guía N° 30 Orientaciones generales para la educación en tecnología, propone como reto a los educadores de Colombia ser competente en tecnología como una necesidad para el desarrollo de la sociedad. 

La ministra de educación Cecilia Vélez White durante su periodo 2002-2010  expresó que en la Asamblea General por la Educación realizada en agosto de 2007 se recogieron los aportes de más de 20.000 colombianos representantes de todos los sectores de la sociedad al Plan Nacional Decenal de Educación 2006 – 2015, expresando un gran interés por integrar la ciencia y la tecnología al sistema educativo, como herramientas para transformar el entorno y mejorar la calidad de vida. Así mismo, plantearon la necesidad de definir claramente los objetivos y las prioridades de la educación para responder a las demandas del siglo XXI, mediante propuestas y acciones concretas encaminadas a asumir los desafíos de la sociedad del conocimiento. (Nacional, 2008). 

Sin embargo, se puede evidenciar que a pesar de los esfuerzos de las diferentes entidades interesadas por establecer proyectos y programas es muy poco el avance que se observa en la educación pública de Colombia. 

César Coll (2009) en su artículo Aprender y enseñar con las TIC: expectativas, realidad y potencialidades,  expresa que el conocimiento se ha convertido en la mercancía más valiosa de todas, y la educación y la formación en las vías para producirla y adquirirla. Por lo tanto, en este escenario la educación adquiere una nueva dimensión: se convierte en el motor fundamental del desarrollo económico y social. Es así, como las TIC se presentan como instrumentos poderosos para promover el aprendizaje, tanto desde un punto de vista cuantitativo como cualitativo. Por una parte, estas tecnologías hacen posible, mediante la supresión de las barreras espaciales y temporales, que más personas puedan acceder a la formación y la educación. Por otra parte, gracias a las tecnologías multimedia e Internet, se dispone de nuevos recursos y posibilidades educativas. (Roberto, Juan Carlos, & Tamara, 2008)

Es evidente, que en la era de la ciencia y la tecnología la escuela debe ser pionera estableciendo en su curriculo la comprensión y apropiación de las TIC como una herramienta que contribuye a mejorar las habilidades de aprendizaje en los estudiantes, además de la motivación porque el uso de la tecnología tiene grandes ventajas, entre ellas el aprendizaje cooperativo porque facilita el trabajo en grupo, permite el intercambio de ideas, el desarrollo del pensamiento creativo, conocer otras culturas, estar en las tendencias de la innovación y el descubrimiento de nuevos aprendizajes de forma activa y divertida. Además existe un alto contenido de datos informativos, de manera amplia y variada acerca de uno o varios temas. 

De hecho, en el documento  “Tecnología para la mejora de la Educación” Francesc Pedró (2015)  expresa que cada vez se han comprometido mayores recursos para llevar computadores y tabletas a las aulas, las familias, los responsables políticos, los titulares de centros y, singularmente, los profesores deben ser capaces de entender de qué manera la tecnología se puede utilizar más eficazmente para mejorar el aprendizaje del estudiante. Y pronto se llega a la conclusión de que esto solo puede hacerse a condición de que se transforme la enseñanza.

Sin una transformación de la educación que se traduzca en más y mejores competencias para todos los estudiantes, difícilmente podrán aprovechar las oportunidades que ofrecen la sociedad y la economía del conocimiento. 

Por lo tanto, es claro que se debe transformar las prácticas educativas, los educadores deben tener las habilidades tecnológicas para acercar a los estudiantes a adquirir el aprendizaje por medio de las nuevas estrategias que brinda el avance de la tecnología. Además es importante que la escuela reconozca el papel fundamental que cumple las TIC en este proceso. 

Para ilustrar lo expuesto, se llevó a cabo un análisis de los contextos de uso de las TIC en las prácticas docentes de los colegios públicos de la ciudad de Cali, con estudiantes de la maestría en Educación en el curso de "Tecnologías aplicadas a la enseñanza" con el educador Henry Taquez  y en los resultados se pudo evidenciar que realmente el uso de las TIC en las escuelas tiene déficit por varias razones. Por ejemplo:

El grupo Número 1. habló de las limitantes que impiden a los maestros integrar las TIC en sus prácticas docentes. Afirman que el poco uso que se les da al pc, tablet o celular es para buscar la información y algunas aplicaciones, pero en algunas áreas, sobre todo en las clases de tecnología y en bachillerato, porque en primaria el celular no lo utilizan. 

El grupo número 2 expuso sobre las actividades que realiza la I.E para motivar a los educadores al conocimiento e integración de las TIC en sus prácticas pedagógicas. Dando como resultado en su análisis que los profesores que enseñan con el uso de las TIC son aquellos que asistieron a la capacitación del programa TIT@, la mayoría de los profesores no cuentan con apoyo de los directivos para reforzar la enseñanza con el uso de las TIC, además no existen suficientes video Beam en las I. E y el préstamo de los equipos se convierte en un tortura. 

El grupo número 3 analizo su trabajo desde la pregunta problematizadora ¿De qué manera el uso de las Tic desarrolla en los estudiantes las habilidades del siglo XXI? mostrando como resultado que los docentes evidencian poco manejo de las HS21 y por lo tanto no existe una intencionalidad directa en su práctica de aula, además los problemas de conectividad dificultan en gran medida la realización de actividades. 

 

El grupo número 4 presentó su análisis del contexto y uso de las TIC desde la pregunta ¿Qué actividades de aula apoyadas en las TIC permiten potenciar el aprendizaje significativo de sus estudiantes? dejando como resultado una buena reflexión. Ellos aseguran que a pesar de las dificultades de conectividad que existen en algunas I. E no es un impedimento para desarrollar actividades  aplicando las TIC. 

 


Como conclusión y teniendo en cuenta lo planteado por los autores mencionados y lo expuesto por los profesores estudiantes de la maestría en educación, considero que a nivel general se debe implementar una política en el currículo para que todos los educadores se familiaricen con el tema de la Tecnología y se logre una Colombia conectada con las TIC. 

Como educadora he comprendido que el uso de las TIC en la enseñanza debe ser algo básico para los estudiantes del siglo XXI y que por ende debo tener presente aspectos que son relevantes en el momento de planear y diseñar mi clase. 

• Tener claro los conceptos básicos, por ejemplo, no es lo mismo innovación e invención. Al igual que muchos confunden la tecnología con la informática. 

• Es importante el planteamiento de una didáctica específica para la educación en tecnología porque posibilita en los estudiantes desarrollar la capacidad de analizar, proponer y realizar actividades que permitan el uso adecuado de la ciencia y la tecnología. Que no solo sea el manejo de los artefactos sino que puedan mirar el uso de las TIC como una oportunidad para viajar a otros mundos sin salir de casa y acceder al conocimiento de una forma más comprensible. 

Después de leer, pensar y analizar también me surge una inquietud. Y creo que en la respuesta debe estar el motivo por el cual existe un déficit en la enseñanza de las TIC. 

¿Qué competencias y habilidades debe tener los docentes del siglo XXI?

El reto docente vs estudiantes del siglo XXI

Referencias Bibliográficas

Nacional, M. d. (2008). Ser competente en Tecnología: una necesidad para el desarrollo. Bogotá: Imprenta Nacional.

Pedró, F. (2015). tecnología para la mejora de la educación . Madrid : fundación Santillana .

Roberto, C., Juan carlos, T., & Tamara, D. (2008). Aprender y enseñar con las TIC: expectativas, realidad y potencialidades. En C. Roberto, T. Juan carlos, & D. Tamara, Los desafíos de las TIC para el cambio educativo (págs. 112-125). Madrid, España: Fundación Santillana.